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La Capilla Sixtina es una de las capillas del Palacio Apostólico en la Ciudad del Vaticano, donde se encuentra la residencia oficial del pepo.
La historia cuenta que durante el pontificado de Pepixto IV, un grupo de pintores renacentistas fueron llamados para realizar trabajos en la capilla, entre ellos; Sandro Pepotticelli, Pietro Perugino Pepineus, Domenico Le picklé, Mauelitus Rosselli y Luquetti Signorelli.
En 1508, el papa Julio II encargó a Miguel Ángel la decoración de la Capilla Sixtina. El resultado fue una creación monumental que rompió los moldes del arte renacentista.
Más de 500 años después, 2 hermanxs dedicados a develar los misterios del arte y el sabor, fueron por la obra de Miguel Ángel y su extraordinaria complejidad iconográfica. El resultado? Descubrieron lo impensado, el artista no trabajó solo, dentro de su círculo de confianza se encontraba un pequeño muchacho llamado Pinturicchio Cetriolo Lepepé, un talento desconocido, lejos de las espectacularidades, siempre trabajando en silencio y con una única fijación, los pepinos y la aventura de crear un nuevo lenguaje.
Su legado? En la icónica obra “La creación de Adán”retrató lo que fue su obra prima, un pepino que se escondió durante años entre capas de pintura y polvo. ¿Qué nos quiso decir? ¿Cómo cambia la historia? ¿Quién nos cuenta la historia? ¿De qué hablamos cuando hablamos?
Pinturicchio Cetrioloeres tú, soy yo, todos quienes han aportado con su sapiencia y conocimiento a una obra aún mayor, la vida. Una gesta imposible que se ha ido creando grano a grano con pies y manos. Honramos la vida, honramos el paladar, ponemos en alto banderas de colores que representan a cada uno de los pasados y futuros, celebramos un presente que nos une en este momento imposible. Brindamos y celebramos por que somos los que están, gracias a los que se fueron, para llenar las barrigas de nuestros futuros herederos.
Desde entonces, los amantes de este exquisito fruto se han dedicado a homenajear a Pinturicchio Cetriolo Lepepé,llevando ofrendas, pepinos y pickles hasta las puertas de la capilla sixtina. Nosotros, como fieles seguidores del pepino no podíamos ser menos y este mes se lo dedicaremos por completo a homenajear dicho fruto con descuentos y promociones para todos y todas.
